No se aceptan devoluciones

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El célebre comediante mexicano Eugenio Derbez había incursionado detrás de las cámaras con anterioridad, dirigiendo muchos trabajos televisivos. La comedia de corte familiar «No se aceptan devoluciones» es su primer largometraje para cine, la cual ya pasó a la historia como la producción mexicana más taquillera de todos los tiempos.

Como actor, director y coguionista, Derbez es el principal responsable de este hito histórico. Costó alrededor de US$5 millones y sumó US$10 millones en su primer fin de semana de exhibición en Estados Unidos, donde se tituló «Instrucciones no incluidas», para superar finalmente los US$44 millones de recaudación total. Esas cifras se refieren a los resultados comerciales obtenidos por la cinta en el mercado norteamericano, sin incluir las futuras ganancias en América Latina, Europa y el resto del mundo.

La receta para semejante triunfo pareciera sencilla: intérpretes simpáticos al servicio de una historia agradable, llena de calidez, humor y buenos sentimientos. Derbez interpreta a un hombre llamado Valentín, quien es un galán sin preocupaciones y pasa de una novia a otra en Acapulco, México, hasta que un día, encuentra a una bebé abandonada en la puerta de su casa.

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Tras viajar a Los Ángeles, California, Estados Unidos, buscando -en vano- a la madre de la niña, Valentín decide adoptarla. Esa decisión cambia su estilo de vida para siempre: sienta cabeza y toma sus responsabilidades como padre y persona.

Seis años después, cuando todo marcha de maravilla para Valentín y su hija Maggie, la madre biológica de la pequeña reaparece de la nada, reclamando sus derechos.

ESTRENO: Jueves 13 de febrero.