Como tenía que suceder, en la pasada entrega de los premios Óscar triunfó «12 años de esclavitud». Este drama del cineasta inglés Steve McQueen ganó tres premios, incluyendo el de mejor película del año.
La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas reconoció así los múltiples méritos de una obra necesaria, que denuncia un crimen atroz, como nadie lo había hecho antes. Los otros dos galardones obtenidos por «12 años de esclavitud» (mejor guión adaptado y mejor actriz secundaria, para Lupita Nyong’o) confirman las virtudes de un filme que ya dejó huella en los anales del séptimo arte.
Por su lado «Gravedad», magnífica odisea espacial concebida por el genio mexicano Alfonso Cuarón, hizo historia al llevarse el mayor número de estatuillas, siete en total: mejor dirección (Cuarón), fotografía (Emmanuel Lubezki), música (Steven Price), montaje (Cuarón y Mark Sanger) efectos visuales, mezcla de sonido y montaje de sonido. Cuarón es el primer director latinoamericano en ganar un Óscar; una hazaña extraordinaria, bajo cualquier punto de vista.
Otra gran triunfadora en la noche fue «El club de los desahuciados» (Dallas Buyers Club), que se alzó con tres premios, todos absolutamente merecidos: mejor actor principal (Matthew McConaughey), actor secundario (Jared Leto) y maquillaje.
La exquisita producción italiana «La gran belleza», de Paolo Sorrentino, resultó ganadora en la categoría de mejor película extranjera. Es otro indudable acierto de la Academia, que de esta manera ratificó el indiscutible valor artístico de una legítima joya fílmica, que no teme comparaciones con «La dolce vita» (1960), de Federico Fellini.
En el apartado de mejor guión original, salió victoriosa «Ella» (Her), extravagante historia de amor escrita y dirigida por Spike Jonze, que se estrena el 20 de marzo, en Costa Rica.
No depararon muchas sorpresas las demás categorías. Como se esperaba, la australiana Cate Blanchett fue declarada mejor actriz principal por su desempeño arrollador en «Jazmín azul», de Woody Allen; mientras que el taquillazo de los estudios Disney «Frozen: Una aventura congelada» arrasó en los dos rubros en que competía: largometraje de animación y canción original.
Le fue sorpresivamente bien a «El gran Gatsby», que estaba nominada únicamente en dos categorías (escenografía y diseño de vestuario) y ganó ambas. Al contrario, la gran perdedora de la velada fue «Escándalo americano», ya que aspiraba a diez estatuillas y terminó con las manos vacías, al igual que otras sonadas competidoras como «El lobo de Wall Street», «Nebraska», «Capitán Phillips» y «Filomena».
